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1. El inicio de la violencia armada (mayo de 1980-diciembre de 1982): Comprende desde el primer acto de violencia cometido por el Partido Comunista del Perú (PCP-SL) en Chuschi, Cangallo, hasta la disposición presidencial que estableció el ingreso de las Fuerzas Armadas en la lucha contrasubversiva en Ayacucho.
2. La militarización del conflicto (enero de 1983-junio de 1986): Abarca hasta la matanza de los penales.
3. El despliegue nacional de la violencia (junio de 1986-marzo de 1989): Comprende hasta el ataque senderista, con el apoyo de narcotraficantes, al puesto policial de Uchiza en el departamento de San Martin.
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5. El declive de la acción subversiva, autoritarismo y corrupción (septiembre de 1992-noviembre de 2000): Abarca hasta el abandono del país del ingeniero Alberto Fujimori.
El año más violento fue el año de 1984 y el periodo de gobierno que presentó más violencia fue el de Alan García Pérez (1985-1990). La CVR encontró en la prédica senderista el planteamiento que los derechos humanos eran construcciones ideológicas al servicio del orden social existente y que por lo tanto, no tenían ningún valor para orientar sus acciones. El PCP-SL sostiene que toda consideración humanitaria debía ceder ante la exigencia de tomar el poder para los sectores sociales oprimidos, a quienes decía representar. Todos los sectores del país fueron afectados de alguna manera por la violencia de estos años entre ellos la Iglesia Evangélica. El Terrorismo y las Fuerzas Armadas cometieron delitos contra los evangélicos sin comprender su reacción ante la violencia. No entendieron por qué no respondían a la violencia con violencia. Ellos enseñan amar al prójimo a pesar que fueron 529 los evangélicos asesinados por los terroristas y por las FF.AA en los períodos 83-84 y 88-91, en Ayacucho y Huancavelica solamente, sin contar con las víctimas de otros lugares del país.
Humberto Lay, ex comisionado de la CVR, sostiene que en un sector importante de peruanos existe mucho resentimiento contra el Estado, contra la sociedad. Se sienten profundamente vejados. Hay odios, separaciones entre las mismas comunidades, hay mucho dolor y amargura. Señala que las audiencias de la CVR no reabrieron heridas, las heridas han estado abiertas por mucho tiempo. A lo largo de la Historia se ha registrado mucha violencia entre las personas debido a la falta de amor en sus vidas. No importándoles la dignidad ni la vida de la gente. Esto nos lleva a preguntarnos: ¿Qué valor tiene la vida humana? La Biblia tiene la respuesta:
"De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna". Juan 3:16
Para Dios la vida humana tiene un inmenso valor, pues tuvo que morir su único hijo Jesucristo en la cruz por nuestros pecados para que toda persona al recibirlo como su Señor y Salvador logre sanar todo resentimiento, dolor y amargura con la paz y amor de Dios obteniéndose la reconciliación de los peruanos.
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